El diario digital El Reporte emprende una nueva etapa. En sus primeros años, este espacio concentró sus esfuerzos en ejercer una oposición firme frente al gobierno de Pedro Castillo, ante el incipiente proceso autocrático en el que se aventuró progresivamente el maestro chotano y la diversa corte de oportunistas que orbitó su poder. Con el paso del tiempo, la mirada del diario se amplió hacia los movimientos ideológicos que transforman al mundo occidental: desde el conflicto entre Rusia y Ucrania, hasta el ascenso de Javier Milei en Argentina.
En ese recorrido, este espacio digital ha sido testigo y reflejo de una migración política cada vez más visible: la de una generación que ha transitado de la izquierda a la derecha, en busca de nuevas certezas. Hoy, ese mismo espíritu de búsqueda se renueva. El diario El Reporte inicia un nuevo ciclo con una meta clara y un horizonte definido: el año 2026.
El próximo año, el Perú se enfrentará a tres procesos electorales decisivos. En abril, los ciudadanos acudirán a las urnas para elegir un Congreso bicameral, un Parlamento Andino y una plancha presidencial que conducirá los destinos del país durante los próximos cinco años. Dos meses después, en junio, volveremos a votar para definir finalmente al nuevo presidente de la República. Y en octubre, el país se movilizará una vez más para renovar sus autoridades municipales y regionales, completando así un ciclo electoral que marcará el nuevo mapa político del Perú. A ello se suman dos relevos institucionales de enorme importancia: la elección de un nuevo fiscal de la Nación, esta vez de carácter definitivo, y la designación, en diciembre, de un nuevo presidente del Poder Judicial.
El 2026 será, por tanto, un año de transiciones simultáneas, en el que casi todas las piezas del aparato estatal se pondrán nuevamente en juego.
Puede decirse, sin exagerar, que el 2026 será un año de renovación sin precedentes. Un punto de inflexión que definirá el rumbo del Perú, no solo para el próximo quinquenio, sino quizás para una o dos décadas más. El impacto de ese nuevo ciclo dependerá, en gran medida, de los megaproyectos que hoy se encuentran en marcha o en agenda.
El puerto de Chancay, símbolo de la integración comercial con Asia, enfrenta todavía severas limitaciones derivadas del abandono estatal. El puerto de Corío, en Arequipa, permanece como una promesa que urge convertir en realidad. A su lado, una red de proyectos espera su oportunidad de transformar el país: el Tren Tumbes–Tacna, el tren Lima–Chosica, las líneas dos, tres, cuatro y cinco del Metro de Lima, el anillo vial periférico, la gestión sostenible de Machu Picchu y Caral, el puerto espacial de Talara, los nuevos hallazgos de petróleo frente a Lambayeque, el puerto Eten, el proyecto Majes Siguas y muchos otros que podrían converger en una misma dirección.
Todo parece alinearse —por primera vez en mucho tiempo— para que el Perú inicie un despegue con una velocidad inédita, siempre y cuando sepa sostener la visión y el impulso que el futuro exige.
En consecuencia, El Reporte avanza con firmeza hacia un propósito claro: conducir a la opinión pública mediante la información y la reflexión, en vísperas de un año electoral decisivo. Nuestra apuesta es ofrecer una mirada distinta, libre de los intereses que condicionan a los medios convencionales, y guiada por los valores conservadores, patrióticos y democráticos que han definido siempre la identidad de este diario.
Comprometidos con nuestros lectores, seguimos caminando con responsabilidad y convicción hacia el 2026.
Y en ese camino, extendemos una invitación abierta: a nuestros suscriptores, colaboradores y simpatizantes, para que se sumen con sus ideas, comentarios o escritos a este proyecto periodístico. Porque El Reporte no solo se construye desde una redacción, sino también desde la comunidad de lectores que creen —como nosotros— en la fuerza de la palabra libre.
Etiquetas: 2026, Congreso, El Reporte, Elecciones, Política Last modified: 7 de octubre de 2025
Muy bien Alfonso, el medio que diriges se renueva y sigue en línea con la democracia y el respeto a los intereses nacionales permanentes, como grandes líneas maestras como son el crecimiento económico con desarrollo , ser potencia mundial y como señalas que coinciden muchos proyectos que nos catapultarán si sabemos hacer bien las cosas. Cómo nos irá con la bicameralidad?
Excelente Alfonso buen análisis. Vamos para adelante.