Educar, un acto de esperanza, por Alfredo Gildemeister
Hace unos días, un profesor de la Universidad del Pacífico, un poco mayor que yo, se me acercó en la sala de profesores en donde siempre voy antes de mis clases a tomar un café bien cargado, y me dijo unas palabras muy sencillas que se me quedaron gravadas: “Tu padre fue mi profesor y …...