A pesar de ser el primer encuentro con un medio local, luego de su visita a Estados Unidos, por lo intrascendente y mediocre no vale la pena comentar la cómoda entrevista que Pedro Castillo ha brindado a TVPerú. No se abordó con agudeza ni profundidad ni un solo tema importante. Por tanto, Pedro Castillo sigue sin enfrentar a una prensa crítica e independiente. Cumple así 110 días en que sus temores le impiden dar cara a una rueda de prensa donde rinda cuentas a la Nación.
Por otro lado, la Fiscalía desmiente al ministro del interior Dimitri Senmache. Señala que con oportunidad se advirtió de la necesidad de vigilar al fugado Juan Silva, corrupto individuo que hizo del Ministerio de Transportes y Comunicaciones un organismo para la coima. Senmache mintió al Congreso de la República en su presentación ante la Comisión de Fiscalización, demostrando con ello un extraño comportamiento que habría desembocado, como mínimo por negligencia, otros dicen que por complicidad, en la fuga de un individuo que sabe mucho y cuyas declaraciones podrían comprometer al propio Pedro Castillo.
Desde que dio sus primeros pasos al frente del ministerio del interior, Senmache tuvo una actuación cuestionable. Desarticuló el comando que venía investigando a los sobrinos del presidente Castillo, que había puesto contra las cuerdas a Bruno Pacheco y que tenía, además, experiencia en inteligencia. Me refiero a la destitución, por órdenes de Pedro Castillo, del General PNP Vicente Tiburcio lo que se hizo un día después de la juramentación de Senmache. Por ello es razonable pensar que un individuo que se presta a esas destituciones también cederá fácilmente a presiones políticas para así facilitar la huida de un corrupto consumado como Juan Silva. “Al presidente Castillo hay que blindarlo” dirían algunos.
Por eso se hace imprescindible que el ministro del Interior sea censurado. Luego de su presentación ante la Comisión de Fiscalización del Congreso los parlamentarios quedan facultados para iniciar el proceso de censura. En paralelo considero que Senmache debe ser investigado a fondo por parte de la Fiscalía de la Nación. Su accionar es cuestionable y ha hecho mucho daño a la lucha contra la corrupción. Un individuo como él es un pasivo en un ministerio clave en combatir los delitos y crímenes de gobierno. Esperemos que la moción de censura empiece a recolectar firmas a la brevedad.
