El 30 de diciembre de 1970, Luis Banchero Rossi fue asesinado por Vilca Carranza en su casa de Chaclacayo. Estaba acompañado por Eugenia Sessarego Melgar, quien fue torturada y vejada en el asesinato, y luego tuvo que pagar con varios años de cárcel por una supuesta complicidad que nunca se probó. La señora Sessarego llevaba un libro de José Donoso llamado El Obsceno Pájaro de la Noche para leer aquella noche. Años después leí el libro. Este relata la historia de unos millonarios que, al nacer su hijo con un aspecto monstruoso, empezaron a traer a su hacienda a las criaturas más horrendas de todas partes del mundo, con el fin de que su hijo pudiera parecer bello en comparación.
Hace pocos días me enteré del veto de la industria progresista de Hollywood (Woke) a la película "Sounds of Freedom" (Sonidos de Libertad), que narra la historia de la trata de niños y su explotación con fines nada santos por parte de delincuentes que obtienen miles de millones de dólares en estas operaciones. El Obsceno Pájaro de la Noche me recuerda a Hollywood como una sociedad que necesita disfrazar su fealdad y vileza, haciendo aceptables todas las monstruosidades que existen, para lo cual se utiliza el cine, las compañías de streaming y todos los medios audiovisuales disponibles, incluyendo la televisión abierta, para poder normalizar y concienciar a los niños en la promiscuidad, el sexo, las drogas, la pedofilia y otras lacras que persiguen a esas desafortunadas personas.
Es por eso por lo que El Obsceno Pájaro de la Noche se encuentra cada vez más arraigado entre nosotros y se ha convertido en una fuente de ingresos durante mucho tiempo, como si fuera una semblanza moderna de los coliseos romanos, donde la muerte y los excesos fascinaban a la gente. Esta novela de Donoso, que pretendió infundir terror, hoy en día se está volviendo una realidad que nos acompaña y que trivializamos.