Donald Trump volvió a protagonizar la última congestión mediática. Fue arrestado un par de horas, luego fue liberado y finalmente desde su mansión en Florida desenrolló su habitual verbo descarnado para defenderse. Esta secuencia sin precedentes para un ex presidente de Estados Unidos es consecuencia de una investigación encabezada por el fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg. Este confeso demócrata tiene bajo la lupa al líder republicano por haber realizado presuntos pagos millonarios en plena campaña presidencial del 2016 para ocultar información íntima, una de estas una relación extramatrimonial con la actriz porno Stormy Daniels. Asegura que detrás de esto hubo un propósito mayor, el mismo que no supo explicar ante el tribunal de Nueva York. Uno de los principales insumos de este caso es el testimonio de Michael Cohen, ex abogado del acusado y ahora uno de sus enemigos. Esto se da a un año de las elecciones presidenciales en el país norteamericano.
La llegada
Después de un día en la Torre Trump, el magnate inmobiliario, como ya lo había planificado, se entregó el 4 de abril a la Fiscalía. Ya en la sede de esta institución, lo arrestaron y lo llevaron hasta el tribunal de Nueva York, donde el juez Juan Merchan leyó los 34 cargos que hay en su contra, todos vinculados a un triple pago a distintas personas durante la campaña presidencial del 2016 para mantener bajo la alfombra episodios privados como el de una relación clandestina que habría tenido con Stormy Daniels, una actriz de cine para adultos.
El caso gira principalmente en torno a unos 130.000 dólares que habría entregado a la mujer mencionada. El encargado de esta misión habría sido su entonces abogado, Michael Cohen, a quien después, de acuerdo a la tesis fiscal, le devolvió el dinero los meses posteriores bajo el concepto de minutas legales, las mismas que en realidad no existirían. Asimismo, se le acusa de un pago de 30.000 dólares a un portero que quería revelar que Trump tenía un hijo fuera del matrimonio. Esta información se habría disuelto después que David Pecker, entonces directivo de la empresa de medios de comunicación AMI, pagara por la data para no publicarla. Y el tercer pago, en el que también está involucrado AMI, es uno de 150.000 dólares a la ex modelo de la revista Playboy Karen McDougal, con quien también habría tenido relaciones pese a estar casado.
Versión fiscal
No hubo cargos por fraude fiscal ni por obstrucción a la justicia. El asidero de Bragg es el pago por un silencio múltiple (lo cual no está penado en Estados Unidos) para ocultar, de acuerdo con su prisma, un delito mayor. La máxima traducción de esta fuerte sospecha —la que no quiso precisar porque la ley neoyorquina no se lo exige— es que habría una violación de las leyes de financiación electoral federales, terreno donde no tiene jurisdicción.
“Trump y otros emplearon una trama para identificar, comprar y enterrar información negativa sobre él e impulsar sus perspectivas electorales. A continuación, hizo todo lo posible por ocultar esta conducta, provocando docenas de entradas falsas en registros mercantiles para ocultar actividades delictivas, incluidos intentos de violar las leyes electorales estatales y federales”, dijo en una rueda de prensa.
Descargos
Después de ser liberado, Trump —sobreviviente de dos juicios políticos— volvió inmediatamente a su mansión de Mar-a-Lago en Palm Beach, Florida. Y por la noche, muy a su estilo, se pronunció.
"Ahora somos oficialmente un país del tercer mundo. Solo me atacan porque lucho por ti. No pueden comprarme y no pueden controlarme y eso los asusta más allá de lo creíble (...) Tengo un juez que odia a Trump con una esposa y una familia que odian a Trump, cuya hija trabajó para Kamala Harris y ahora recibe dinero de la campaña de Biden/Harris... Está sacado de la antigua Unión Soviética. ¡Ahí es donde estamos!", dijo. "El único crimen que he cometido es defender sin miedo a nuestra nación de aquellos que buscan destruirla", agregó.
"Alvin Bragg ha cerrado toda la ciudad, ha llamado a 38.000 policías de Nueva York, ha cerrado el FDR Drive y está gastando unos 200 millones de dólares de fondos municipales, todo por un acuerdo de confidencialidad de 130.000 dólares, apuntó sobre el fiscal". Mientras que el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, apuntó que el fiscal Bragg debe rendir cuentas ante el Congreso por instrumentalizar el sistema judicial federal.
La situación de Trump todavía es ambivalente. Por un lado varios de sus anticuerpos consideran que es el inicio del fin del ex presidente, pero por el otro sus aliados aseguran que el caso no es sólido y que es el inicio de una campaña presidencial renovada. El vértigo del magnate va de menos a más a tan solo unos meses de las elecciones primarias republicanas (el 4 de diciembre del 2023) y a un año y un poco más para las elecciones presidenciales (entre el 2 y el 8 de noviembre del 2024).