Roberto Challe brilló con luz propia desde sus primeros años en el fútbol profesional, consagrándose como líder en Universitario de Deportes y la selección nacional en jornadas memorables.
Su paso por el club de la calle Odriozola fue determinante en su carrera, al hacer dupla con Lucho Cruzado en el medio campo de un club centenario, que entre mediados de los sesenta y setenta se convertiría en un referente internacional del fútbol nacional. Las jornadas del club crema en la Copa Libertadores de 1967 fueron memorables por las victorias alcanzadas en Buenos Aires, enfrentando a Racing Club y River Plate. Los triunfos alcanzados en tan solo 48 horas, en los estadios de Avellaneda y en el Monumental de River Plate, fueron en mi concepto el preludio de lo que sería la clasificación al Mundial de México 70. El equipo de Universitario estaba formado por Rubén Correa en el arco, Pedro González, Luis La Fuente, Héctor Chumpitaz y Nicolás Fuentes en la defensa. En el medio campo la presencia de Luis Cruzado y Roberto Challe eran determinantes. Con una delantera integrada por Víctor Calatayud, Ángel Uribe, Enrique Casaretto y Kilo Lobatón (o en su defecto Enrique "Ronco" Rodríguez) la "U" era un equipo competitivo a nivel sudamericano. El triunfo de 2 a 1 frente a Racing y la victoria de 1 a 0 frente a River, levantaron el prestigio del fútbol peruano en un contexto en el que las selecciones y equipos de Brasil, Uruguay y Argentina destacaban con nitidez. Brasil había logrado en dos oportunidades la Copa del Mundo en Suecia 1958 y Chile 1962, mientras que Uruguay fue el primer campeón del Mundo en 1930, logrando la hazaña del "Maracanazo" ganando la Copa del Mundo en 1950. Por su parte Argentina había asistido a todas las Copas del Mundo y sus equipos se medían de igual a igual con los equipos sudamericanos y europeos.
La "U" abrió el camino hacia México 70 de la mano de jugadores de la talla de Héctor Chumpitaz y Roberto Challe. Roberto Challe campeonó con Universitario en tres oportunidades, pasando a integrar las filas del Defensor Lima a mediados de 1972. En las Eliminatorias jugadas en Agosto de 1969 en Lima, La Paz y Buenos Aires, era Argentina la favorita en opinión de los cronistas deportivos de diferentes nacionalidades. El equipo argentino contaba con figuras como Agustín Cejas en el arco, Perfumo o Marzolini en la defensa o Pachame en el medio campo. Argentina se preciaba de sus triunfos en sucesivas Copas Libertadores, incluso en competencias intercontinentales, lo que permitía que su selección tenía a su favor una larga experiencia. La selección peruana de ese entonces no siendo la favorita demostró ser mejor que Argentina, con el triunfo contundente logrado en el Estadio Nacional de Lima, con un gol memorable Pedro "Perico" León.
Cuando el Perú debía definir su clasificación frente a Argentina en Buenos Aires, a nuestra selección le era suficiente alcanzar un empate; mientras que la selección de Argentina debía necesariamente ganar, lo que hubiera representado que tanto las selecciones de Perú, Bolivia y Argentina tuvieran el mismo puntaje (4 puntos). En mi concepto más allá de nuestro arquero Luis Rubiños y del juego afiatado de nuestra selección, más allá de nuestra férrea defensa con Orlando de la Torre y Héctor Chumpitaz como centrales, Eloy Campos y Rafael Risco, como laterales. Más allá del papel cumplido por Lucho Cruzado, Julio Baylon, "Perico" León, Teófilo Cubillas y Oswaldo "Cachito" Ramírez que marcará dos contundentes goles; en mi concepto esa tarde en la "Bombonera" de Boca Juniors fue determinante el estado anímico de nuestra selección.
La clasificación al Mundial de México 70, lograda en la mítica Bombonera de Boca Juniors, en mi concepto no sólo fue consecuencia de la superioridad técnica del equipo nacional, de la mística y garra de nuestro capitán Héctor Chumpitaz, sino en mi concepto tuvo en Roberto Challe el jugador que trató de igual a igual a los jugadores argentinos e incluso en determinados momentos los desafió, a pesar del aliento de las tribunas y de la agresividad puesta de manifiesto por los espectadores que llegaron a arrojar botellas y proyectiles sobre el campo de juego.
En la vida las grandes victorias se consiguen con esfuerzo y por cierto con una dosis de confianza y seguridad emocional. La selección dirigida por Didi, marcó una época, llegó a ocupar el 7mo lugar en la Copa del Mundo, levantó la autoestima nacional, siendo ejemplo para más de una generación. Roberto Challe como Director Técnico de la selección peruana en 1985, demostró liderazgo, como años después lo demostraría cuando dirigió a Universitario de Deportes en el histórico Tricampeonato conseguido en el recién inaugurado Estadio Monumental de Ate.
La muerte de Roberto Challe ocurrida recientemente, fue lamentada no sólo por la hinchada de Universitario de Deportes, sino por la afición nacional. Roberto Challe demostró técnica y calidad en su juego, siempre desestimó jugar en el extranjero y que duda cabe siempre será un referente en el fútbol nacional, más allá de cualquier consideración. Durante su carrera deportiva, vistió varias camisetas de equipos nacionales, sin embargo su nombre siempre está asociado a la "U".