El asilo concedido a Nadine Heredia confirma la estrecha relación entre el presidente Lula da Silva de Brasil y la ex pareja presidencial. Ollanta Humala y Nadine Heredia fueron acusados por el Ministerio Público y conforme a los procedimientos legales establecidos, han sido condenados a quince años de pena privativa de libertad.
El derecho de asilo fue normado en 1954 con el claro propósito de evitar que las dictaduras latinoamericanas o los tiranos de turno, priven de la libertad a opositores políticos en diversos países de la región. El derecho de asilo fue desarrollado en el plano del derecho internacional, como un instrumento garantista ante los abusos del poder. El caso emblemático marcado por la controversia jurídica entre los gobiernos de Colombia y Perú, a propósito del asilo concedido a Víctor Raúl Haya de la Torre entre 1949 y 1954, fue el marco referencial que impulsó la aprobación de la Convención de Caracas en 1954. Sucesivos gobiernos colombianos de diferente orientación política, defendieron el asilo otorgado al líder aprista y no dudaron de defender su punto de vista ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya.
Los gobiernos de Perú y Colombia comparecieron ante el Tribunal Internacional, llamando la atención de la comunidad internacional en ese entonces. El APRA era un partido proscrito, sus líderes habían sido deportados, privados de su libertad o se encontraban perseguidos por los esbirros de la dictadura. Haya de la Torre abandona en abril de 1954 la residencia de la Embajada de Colombia en Lima rumbo a México haciendo uso de un pasaporte uruguayo, en virtud de que la dictadura lo había privado de la nacionalidad peruana. Haya de la Torre retornó al Perú en 1956, cuando se había puesto punto final a la dictadura.
Ollanta Humala y Nadine Heredia no son perseguidos políticos, no fueron privados de su ciudadanía e incluso el ex presidente Humala postuló a la presidencia de la República en los comicios del 2021. El asilo concedido es irregular, contraviene lo establecido en la Convención de Caracas y más aún fue concedido el mismo día que un Tribunal de Justicia nacional leía la sentencia condenatoria contra los esposos Humala Tasso y Heredia Alarcón.
El gobierno del presidente Lula está demostrando su lealtad política con sus socios, que en el ejercicio del poder favorecieron abiertamente los intereses de las empresas constructoras brasileñas. La acusación fiscal se ha circunscrito a los llamados aportes de campaña en los comicios presidenciales del 2006 y 2011. Los fondos procedentes del gobierno de Venezuela cuando ejercía el poder Hugo Chávez, así como los fondos aportados por la empresa Odebrecht han formado parte de la investigación y la acusación fiscal, configurando el tipo penal de "lavado de activos".
El asilo otorgado no constituye un hecho aislado, sino forma parte de una estrategía concertada o planeada por la señora Heredia Alarcón, con el claro propósito de eludir la acción de la justicia. Humala Tasso y Heredia Alarcón afrontan diversos procesos penales, que incluyen la ejecución del Gasoducto del Sur entre otros. Se pretende contradecir la sentencia, alegando que el tipo penal de "lavado de activos" es inaplicable, en función de la fecha en la que se realizaron los aportes de campaña.
La "trama de Odebrecht" ha marcado la política nacional en los últimos lustros. El presidente Lula Da Silva desde el gobierno lideró y promovió que las empresas constructoras brasileñas participaran en la ejecución de las principales obras de infraestructura en América Latina. Desde el gobierno, con la participación del partido de los Trabajadores (PT) y las empresas constructoras se financiaron campañas electorales y lograron penetrar las más altas esferas del poder.
Hace una década desde Estados Unidos llegaron las primeras señales de alerta, luego sería Brasil el "epicentro político" en el que la acción de la justicia llegaría a incriminar incluso al propio Lula Da Silva. Brasil como primera economía regional, pretendía ejercer control político sobre gobiernos subnacionales, ministerios y gobiernos nacionales. El PT lideraba el llamado Foro de Sao Paulo que nucleaba a partidos políticos en toda América Latina. Lula como líder político pretendia erigirse en un referente internacional promoviendo una opinión crítica respecto a Estados Unidos, afianzar los BRICS, fortalecer UNASUR y tener influencia en gobiernos latinoamericanos.
Si Hugo Chávez hizó generosos aportes desde el gobierno, apoyándose en la renta petrolera de PDVSA, Lula Da Silva como gran "capitoste" o "padrino" “instruyó” a las empresas constructoras brasileñas entregar generosos aportes de campaña.
Ollanta Humala, un militar en situación de retiro y Nadine Heredia, sin trayectoria política, sin actividad económica conocida, tuvieron la audacia de organizar un partido político, como una forma de emprendimiento electoral. El partido Nacionalista convertido en una organización criminal, para hacerse del poder y enriquecer a la pareja presidencial. No se constituyó un partido con ideario, ni filosofía política, que pretendiera impulsar un proyecto de transformación social. Ollanta Humala, un militar con pocas luces, que supuestamente se levantó en armas contra el gobierno de Alberto Fujimori, en momentos en que la década del "fujimontesinismo" estaba llegando a su fin, logró llegar al gobierno en el 2011.
Nadine Heredia, su hermano Ilán Heredia y su señora madre han sido sentenciados, es decir los integrantes de un grupo familiar han sido condenados. La señora madre de Nadine Heredia ha sido sentenciada a cinco años de pena suspendida, su hijo Ilán Heredia (hoy prófugo) ha sido sentenciado a doce años de pena privativa de libertad. Es virtualmente ocioso describir cómo aumento el patrimonio familiar, cómo el "estilo de vida" de la familia Humala-Heredia cambió sustancialmente. Ollanta Humala y Nadine Heredia han sido sentenciados a pena privativa de libertad. La defensa legal de la pareja presidencial, puede desarrollar diversas estrategias, sin embargo es claro que tarde o temprano se deberan cumplir las penas impuestas.
No dudo que el gobierno presidido por Dina Boluarte ha "colaborado" ampliamente con la estrategía desarrollada por Nadine Heredia. El gobierno peruano debió expresar de forma clara ante el gobierno de Brasil, que la señora Nadine Heredia no es una perseguida política y que un Tribunal nacional ha dictado sentencia condenatoria. El otorgamiento "express" del salvoconducto demuestra la complacencia y complicidad por parte del Poder Ejecutivo. No debemos olvidar que el primer ministro Adrianzén fue ministro de Estado durante el gobierno del presidente Humala, como lo fue también el ex primer ministro Otárola que de modo "sospechoso" trató de desviar la atención de la prensa y la opinión pública, declarando sobre el caso "Yasiré".
No seamos ingenuos. Por otro lado, ha sido evidente como los integrantes de la "costra caviar" han guadado silencio respecto al otorgamiento de asilo a Nadine Heredia. Ollanta Humala, Nadine Heredia, Alejandro Toledo, Susana Villarán y Martín Vizcarra, tienen en común haberse enriquecido en el ejercicio del poder. El Perú deberá dejar atrás la "trama de Odebrecht" y poner fin al poder de la "costra caviar".
Más allá de todo, podemos afirmar que Lula Da Silva no los desampara.