Con la inesperada venia de la Fiscalía, el frente izquierdista activó una nueva treta: golpear al bloque patriota en el terreno legal. Después del rotundo fracaso de sus marchas violentas y en medio de la caída progresiva de sus operadores —la próxima sería Betssy Chávez—, este bloque se inventó una estructura delictiva en la oposición y denunció a sus supuestos miembros por los delitos de conspiración para sedición y grave perturbación a la tranquilidad pública en agravio del Estado Peruano. El artífice, un tal Gino Alejandro Román Torres, activó este dispositivo contra Luis Alejandro Giampietri Rojas —aunque todo apunta a que quiso poner al almirante Luis Giampietri—; el constitucionalista Lucas Ghersi —quien busca frenar la asamblea constituyente—; el analista político José Luis Gil —columnista de esta casa periodística—; los periodistas Claudia Toro (Willax) y Marcial Vilela (PBO) —claves por sus reportajes y los careos en vivo—; la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, entre otros. La consigna es clara: si caigo yo, caemos todos.
Para esta movida fue vital la Segunda Fiscalía Corporativa Penal de Cercado de Lima, Breña-Rímac-Jesús María. Este despacho dispuso la apertura de una investigación preliminar por el plazo de (60) sesenta días.
La denuncia de Gino Román —recordado por nada loable, pero sí por golpear y amenazar con una navaja a Verónica Lara; de esto dan cuenta elementos de sus filas como Carlos León Moya— tiene como asidero las típicas conspiraciones elaboradas solo por una mentalidad izquierdista:
"Un grupo de derecha (grandes empresarios, militares en retiro, periodistas y políticos) encabezados por oficiales de la Marina, entre ellos, Jorge Montoya Manrique de manera pública, en Willax y en diferentes medios de comunicación social llamaron a desconocer el resultado de las elecciones realizadas el 6 de junio de 2021, José Cueto Aservi sostuvo que no pueden permitir que el "totalitarismo" "radical" y "comunista" llegue para destruir el país. En esa misma línea, Rafael López Aliaga, en un mitin, expresó que de ganar Perú Libre traerían pobreza y miseria, exclamando "muerte a Castillo”, "muerte a Cerrón”, "muerte al comunismo y a sus representantes", se lee en la denuncia.
Este intento por socavar al bloque que desmanteló al clan chotano tiene en la mira a varios elementos de Willax. Uno de estos es Enrique Luna Victoria, el gerente general. Una diligencia fiscal le ha dado un plazo de 3 días para que “ informe sobre el lugar o la sede desde donde se difunden los distintos programas que ofrece a través de señal abierta en el país”. También está Beto Ortiz. “Llamó a realizar actos de violencia, difusión de información falsa, cuando sostuvo que el presidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), era un "juez rojo" y "terrorista, por haber defendido, como abogado libre, a procesados por terrorismo”, precisa el material y agregan que el periodista dañó la imagen impoluta de Perú Libre al dar tribuna al congresista Roberto Chiabra para decir que el movimiento del lápiz “tiene nexos con el terrorismo”.
Para el denunciante, que expuso su incompatibilidad con la realidad, la Federación Nacional de Trabajadores de la Educación (Fenatep), el Frente de Defensa del Pueblo de Ayacucho (Fredepa), ambos fachadas de Sendero Luminoso, y los incontables personajes como Iber Maraví —quien hasta fue ministro— son botones virtuosos.
Este mismo agente de la convaleciente izquierda también apuntó contra la organización Reacciona Perú. En este caso partió de una reunión en el Hotel Bolívar entre patriotas como Lucas Ghersi, Claudia Toro, José Luis Gil, Víctor Auza, Luis Alejandro Giampietri Rojas y Omar Sánchez. También estuvo integrada Keiko Fujimori. Para Román este frente quiso convocar una serie de acciones ilícitas para derrocar a Pedro Castillo, quien el pasado 7 de diciembre se desenmascaró ejecutando sin éxito un golpe de Estado.
Al respecto, se pronunció el almirante Calixto Giampietri, quien fue advertido de que en realidad quisieron poner su nombre. “Córrame usted traslado de dicha denuncia y no moleste usted a un "Héroe de la patria". Yo soy uno de los responsables de dicha iniciativa ciudadana y asumiré mi responsabilidad ante tan espuria acusación”, se lee en su tuit. También escribió José Luis Gil: “He sido denunciado por "Conspiración para una rebelión, sedición o motín" por participar de las marchas contra Castillo en 2022. Los rojos están desesperados y usan a denunciado por intento de feminicidio Gino Román. Una condecoración para mí en esta lucha por la democracia y la libertad”.
De esta secuencia era esperable los manotazos de ahogado de la izquierda. Lo imprevisto fue que uno de los despachos de la Fiscalía de la Nación, liderado por la intachable Liz Patricia Benavides, les diera luz verde. Es hora de identificar a los topos, a estos enemigos que no han entendido la dura etapa que se ha superado.