El tiempo de Jorge Luis Chávez Cresta en el Ministerio de Defensa llegó a su límite. Han pasado casi 9 meses desde que asumió y lo que se han contabilizado son más muertes que logros. Ahí tenemos como botón las emboscadas terroristas en el Vraem que expusieron la errante estrategia antisubversiva que se viene ejecutando, razón por la que el Congreso ha encaminado una interpelación en su contra con la finalidad de censurarlo. Y esto solo es la punta del iceberg. Un gobierno que busca mayor legitimidad no puede tener en sus filas a alguien que fue aliado de Martín Vizcarra y Pedro Castillo: como titular también en Defensa y viceministro de Energía y Minas, respectivamente. Ya superó en marzo una interpelación. Esta vez, por el bien de nuestras instituciones marciales, debería ser expectorado y reemplazado por alguien con el talento para no manchar un portafolio tan importante.
Las perlas
En una nación marcada por la constante lucha contra el crimen y el terrorismo, la seguridad de las Fuerzas del Orden es esencial. Sin embargo, bajo el liderazgo del ministro de Defensa, Jorge Chávez Cresta, esta estabilidad se ha visto gravemente comprometida, con consecuencias mortales.
El 12 de febrero, se produjo una emboscada de los remanentes de Sendero Luminoso. Específicamente en Pichari, Natividad, VRAEM, donde asesinaron a siete policías y hasta a ‘Marquito’, un perro que este pelotón había rescatado y que había incluido en su equipo.
Después se dio el trágico incidente en el que seis militares fallecieron tras ahogarse en el río Ilave cuando intentaban escapar de una turba de manifestantes en Puno. Esto fue en marzo. Hasta entonces, la gestión del ministro Chávez Cresta había dejado un reguero de sangre y una pregunta que exigía una respuesta: ¿quién iba a asumir la responsabilidad política de estos hechos?
Fue por esta razón que en ese tiempo desde el Congreso se encaminó una primera interpelación contra el funcionario. Respondió 54 preguntas sobre los temas previamente mencionados. Al haber superado este amago de censura, continuó y empezó a justificar la desorientación de su sector diciendo que al asumir lo había “encontrado con altos índices de corrupción”.
Jamás imaginó que los narcoterroristas iban a dar un nuevo golpe.
En la madrugada del 4 de septiembre, un contingente del Ejército y la Policía Nacional fue emboscado durante una operación antidrogas en Putis, Huanta, Ayacucho. Murieron cuatro militares. El VRAEM se está descontrolando.
Pasado ruidoso
Chávez Cresta también es recordado por haberse paseado en el aparato público durante distintos gobiernos. En noviembre de 2017, en medio del gobierno de PPK, asumió la jefatura del Instituto Nacional de Defensa Civil. Luego, ya con Martín Vizcarra, tomó el Ministerio de Defensa. Recién se fue cuando el Lagarto fue vacado. Posteriormente, se unió a las filas de Pedro Castillo, quien le dio el Viceministerio de Energía y Minas. Y para sellar esta secuencia volvió a ser el titular del Mindef, esta vez con el gobierno de Dina Boluarte.
Otros datos relevantes sobre su pasado es que ha sido vinculado con el golpe de Estado del profesor chotano, ya que estuvo en Palacio el mismo día de este quiebre del Estado de Derecho, el 7 de diciembre. Esto lo confirmó la misma Lina Sánchez Kamnada, exsecretaria de Gustavo Bobbio, quien era en ese entonces el ministro de Defensa. Asimismo, en noviembre del 2021 Chávez ya se había reunido en Palacio de Gobierno con el personaje del sombrero. Justo se dio cuando se destituyó a Walter Ayala en el portafolio de Defensa, lo cual deja entrever que se estuvo negociando su posible asunción. ¿Estamos hablando de alguien sin identidad política y que solo se vende al mejor postor?
Respuesta
Se codeó con Vizcarra y con Castillo. No defendió adecuadamente a las Fuerzas Armadas durante las protestas pos-golpe de Estado. De hecho, estuvo presente en la sede del Ejecutivo el mismo día de este hecho. Y encima quiso irse a Argentina cuando se le está exigiendo respuestas.
El Congreso, con 40 votos, ha hecho bien en activar su interpelación. Ahora depende de los parlamentarios finalizar su tarea con una censura. El fujimorismo, al ser la bancada más sólida, debería votar en bloque la censura de Chávez Cresta, para demostrar que tan lejos o cerca están de este gobierno. Y el resto debería seguir este ejemplo. Solo se necesitan 66 votos. ¿Dejaremos que el Mindef siga poniendo en peligro a las Fuerzas Armadas? Desde esta tribuna confiamos en que los legisladores no dejarán pasar esta oportunidad. Boluarte ya debería ir pensando en el reemplazo.