En el sector público y, más aún, en el privado, se habla mucho de las habilidades comunicativas, donde el trabajo en equipo parece ser una de las más valoradas en el ámbito profesional. Ahora bien, ¿es posible esto en la política? Creo firmemente que sí, pero quienes nos han llevado la delantera curiosamente durante muchos años son los partidos y centros de pensamiento de izquierda. Estos, a través de diversos foros como el conocido Foro de Sao Paulo y el Grupo de Puebla, además de sus innumerables fundaciones que organizan encuentros desde la academia, los centros de pensamiento y, por supuesto, los foros políticos, trabajan coordinadamente bajo un plan a mediano y largo plazo.
Recordemos que es posible trabajar en equipo y perseguir un mismo objetivo. Las elecciones de 2021 en Perú son un gran ejemplo de esto, y las consecuencias de dicha elección fueron una clara muestra de que es posible. Muchos durante este periodo fuimos amenazados, señalados y algunos hasta perseguidos, pero al final pudimos reconocer que sí era posible trabajar conjuntamente y lograr un objetivo puntual, o mejor dicho, a corto plazo.
Ahora bien, ¿por qué la derecha o centro derecha no logra realizarlo con frecuencia? A nivel de partidos políticos vemos iniciativas desde la UPLA o el Foro de Madrid, el cual últimamente ha estado muy activo en la región. Estos espacios políticos son muy importantes, pero temo que no son suficientes. La academia y los centros de pensamiento, conocidos como think tanks o do tanks, deben trabajar coordinadamente, estableciendo objetivos comunes y sinergias. Por ello, celebro que muy pronto se dé esta posibilidad, donde estas organizaciones puedan trabajar coordinadamente, planificar cursos, formaciones e investigaciones a nivel iberoamericano, y continuar en esta batalla cultural, ideológica y antropológica a la que constantemente estamos expuestos. Es hora de dejar de ser cortoplacistas y empezar a trabajar a mediano y largo plazo. Esta y las próximas generaciones nos lo agradecerán.