¿Qué es aquello que hace que una cosa sea lo que es?, se preguntó un día Aristóteles. Aquí, se plantea un problema metafísico, es decir, “más allá de lo físico”. La pregunta invita a la reflexión sobre el concepto de persona: ¿cómo sé que es una persona?, ¿es algo corpóreo e incorpóreo?, ¿hay consciencia?, ¿soy una construcción social?
Lo primero es señalar qué materia del saber argumenta ello. Y, no es la ciencia. Heidegger decía que la ciencia no piensa. ¿Por qué? Porque ella no reflexiona sobre sus conceptos fundamentales (materia, forma, cuerpo, etc). Cuando se plantea estudiar los conceptos, entonces se está haciendo filosofía de la ciencia.
El concepto de persona es fundamental, filosófico. Y, aquí cabe la pregunta de Aristóteles: ¿qué es aquello que hace que una cosa sea lo que es? Es decir, ¿qué hay en la persona para que esta sea persona? Aristóteles dirá que es la substancia lo que determina al Ser. En castellano, la persona es persona por su naturaleza. Somos substancia individual, porque solo hay un “yo”, irremplazable, único. Y, de naturaleza racional, porque poseemos capacidad intelectiva, razón y voluntad. (Boecio decía que la persona es una sustancia individual de naturaleza racional).
Realidad del siglo XXI
Entonces, ¿hay naturaleza humana? Muchos posmodernos niegan la posibilidad de naturaleza, otorgándole al hombre su categoría de persona a la materia que lo compone y a las estructuras sociales que lo acogen al llegar al mundo.
“El modo de producción de la vida material condiciona el proceso de vida social, política e intelectual en general. No es la conciencia de los hombres la que determina la realidad; por el contrario, la realidad social es la que determina su conciencia”. Contribución a la crítica de la economía política (1859), Karl Marx.
Bajo esta lupa del materialismo filosófico, la persona se hace en el mundo y no emerge de su naturaleza. La persona, entonces, es lo que ella puede llegar a ser, tanto en su ética, moral, ética. Pero ya no tiene esencia, por lo que puede ser sólo determinada por su situación social. Por ello, los presupuestos morales dejan de ser universales, existe una arbitrariedad sobre el derecho humano, se pierde la distinción entre vida y no vida.
Si son solo las circunstancias lo que determina lo que es la persona, entonces, ¿cuáles son esas circunstancias que podrían determinar lo que NO es una persona? Para Jacques Derrida, filósofo francés que habla sobre la deconstrucción, el ser humano es persona cuando se inserta en la sociedad a través del lenguaje. Antes no. ¿Un recién nacido acaso no es una persona?
Noción de Persona en Aristóteles
Para Aristóteles las operaciones emanan de la naturaleza. Es decir, yo puedo hablar y pensar, porque soy persona y tengo esa potencia (posibilidad de ser) en mi naturaleza. No podría volar, porque esa operación no está en vínculo con mi substancia.
La persona, como substancia, siempre es persona. Evidentemente, nuestros cuerpos van cambiando, pero seguimos siendo una persona. Estos cambios se llaman accidentes: cambios que son, pero que podrían no ser. Estos podrían ser tu edad, tu altura, tu color de piel, tu peso, etc. Los cambios no modifican sustancialmente la esencia. Ningún cambio niega tu naturaleza.
Perdemos facultades, pero seguimos siendo persona. Nacemos en diversos países y regiones, pero seguimos siendo persona.
Sustancia individual de naturaleza racional. Es decir, que es esencia única, irrepetible, de naturaleza racional por ser de capacidad intelectual.