El excanciller Javier González-Olaechea anunció oficialmente su precandidatura a la presidencia del Perú bajo la bandera del Partido Popular Cristiano (PPC) con miras a las elecciones generales del 2026. En una reciente entrevista con Milagros Leiva, González-Olaechea declaró que el país necesita "un cambio radical" y que él está preparado para liderar esa transformación.
Durante la entrevista, el aspirante a la presidencia expresó que su vida ha sido una preparación para este desafío político. "Me preparé toda la vida para un momento determinado que la historia pone por delante, y es la aspiración presidencial para transformar y producir un cambio radical que el Perú reclama a gritos por todas las calles", manifestó.
González-Olaechea destacó que el PPC es "un partido limpio con tradición y doctrina", con el cual se identifica plenamente por su visión y forma de hacer política. Además, subrayó que el PPC es el único partido que aún no ha tenido la oportunidad de gobernar en el Perú, lo que, según él, lo convierte en la mejor opción para liderar el cambio que el país necesita.
El Estado, un obstáculo para los emprendedores
El precandidato también hizo énfasis en la difícil situación que enfrentan los emprendedores peruanos, señalando al Estado como su principal enemigo. "Los emprendedores, que son la gran mayoría del país, solo ven obstáculos. Son creyentes y no quieren que sus hijos migren, me lo han dicho en las calles: 'Haga algo para que mi hijo no se vaya del Perú'", declaró.
González-Olaechea abogó por un camino en el que se priorice el orden y una economía sana, reconociendo la realidad del país, donde el 75% de la población es informal. "Para ser formal tienes a todo el Estado en contra, no tienes beneficios. En la práctica, el Estado se ha convertido en un enemigo del emprendedor", agregó.
Gira nacional para levantar el orgullo peruano
El exministro anunció que iniciará una gira por todo el país con el objetivo de "levantar el orgullo de los peruanos" y recuperar la esperanza, rompiendo con el viejo ciclo de la política tradicional. Prometió luchar contra la corrupción, la delincuencia y otros males que afectan a los ciudadanos, como la extorsión y la falta de servicios básicos.
Lucha frontal contra la corrupción
Finalmente, González-Olaechea fue contundente al declarar su postura contra la corrupción, mostrando simbólicamente una tarjeta roja y unas esposas, prometiendo que todos los corruptos irán a prisión sin excepción. "Volvamos al inicio de la voluntad que es el cambio radical, que es decirle ¡NO! a todas las prácticas que han llevado al Estado a la postración, impulsadas por la izquierda ideológica y los caviares", enfatizó.
"En las próximas elecciones hay que sacar esta tarjeta roja a todos esos políticos: ¡NO! Hay que acabar con el predominio de la izquierda radical y liberar al Perú metiendo a los corruptos a la cárcel, sin distinción, aunque sea tu pariente, o sea el mío", concluyó con determinación.